El vaivén de entrenadores que nos espera

Diego Pablo Simeone ha iniciado la ronda de renovaciones de entrenadores de Primera División, que puede convertirse en un serial importante de aquí a que acabe la Liga allá por el mes de junio. Con el objetivo de la final de Copa del Rey alcanzado, bien posicionado en el campeonato para estar el año que viene en la Liga de Campeones y eliminado de la Europa League, el Atlético de Madrid consideró que había llegado el momento de hacer oficial un acuerdo al que sólo le faltaba la oficialidad. El Cholo irrumpió en un equipo rojiblanco descompuesto y ha sabido devolverle a sus fueros. Ahora tendrá por delante cuatro años para consolidar un proyecto en el que por primera vez coinciden aficionados y directivos, salvo pequeños detalles.

Hay otros banquillos cuyo futuro es algo más incierto. Uno que no debería serlo tanto es el del Real Madrid. José Mourinho acaba contrato el 30 de junio de 2016 por lo que su continuidad debería estar más que asegurada. Sin embargo, es continuo el run run sobre su salida del club. Que sí el club ha decidido que no puede continuar, que si Mourinho se ha comprometido ya con este o ese club. La realidad, a mediados de marzo, es que la decisión no está tomada. Ni por una parte ni por otra. Adelantarse a los acontecimientos es demasiado atrevido. En el fútbol, bien es sabido, se vive de los resultados. Especialmente los técnicos. Y de momento no hay nada decidido. La única realidad es que el Real Madrid jugará la final de la Copa del Rey, que la Liga parece imposible y que en la Liga de Campeones estará en el bombo en el sorteo de los cuartos de final. Para muchos lo de los cuartos de final no será una gran hazaña tratándose del Real Madrid, pero hay que recordar a los débiles de memoria que ha sido precisamente José Mourinho el que ha devuelto a un club histórico a convertir en una costumbre el acceder a la ronda de octavos. Otros con un "Ferrari" parecido se estrellaron en los octavos. Así conviene no jugar a adivinos porque en las dos temporadas anteriores también se aseguró por el mes de enero la marcha de Mourinho. Y aquí sigue.

Más negro para el Athletic Club de Bilbao parece ver ligado su futuro al de Marcelo Bielsa. El verano pasado estuvo vacilando durante semanas con su continuidad en el conjunto vasco. Eso fue antes del episodio de las obras de Lezama que se intuye como un obstáculo casi insalvable para apostar por un proyecto con el argentino a la cabeza. Pero como Bielsa es tan imprevisible tampoco se puede asegurar que no vaya a seguir. El Athletic, por sí acaso, echa un vistazo al mercado. Más vale prevenir que curar.

Manuel Pellegrini, que todavía tiene dos años de contrato por delante, es otro de los entrenadores que se ha vinculado a varios equipos. Chelsea, Manchester City e incluso la Roma han sondeado las intenciones del entrenador chileno del Málaga. Los problemas económicos del conjunto andaluz le podrían llevar a abandonar un club en el que se siente cómodo y a gusto. Sin demasiadas presiones.

Pero habrá más movimientos. Espanyol, Sevilla, Valencia, Levante, Deportivo, Rayo Vallecano, Mallorca, Celta, Granada deberán decidir sí renuevan a sus técnicos y si apuestan el cambio. El verano viene calentito, también en los banquillos.