SSC Napoli, De Laurentiis: "El nuestro es un sistema futbolístico medieval. Se juega demasiado"

Scudetto y Supercopa de Italia. El SSC Napoli ha levantado dos títulos en este mágico 2025. De ello habló Aurelio De Laurentiis que, con motivo de las felicitaciones navideñas en Radio CRC, comentó: "También con Benítez ganamos dos trofeos - recogen los compañeros de TuttoNapoli.net - pero estos son distintos. A Maradona es imposible igualarle: nadie es tan grande como él, tenía el espíritu de un chaval napolitano de la calle. Con Maradona además trabajamos en una película. Del SSC Napoli, sin embargo, me enamoré de niño, incluso con el burrito del diario de Jacovitti. He pensado en el 'Mercante in Fiera' con los protagonistas de hoy y los históricos, se lo dije enseguida a Bianchini. También sería bonito organizar una velada con el primer premio destinado a beneficencia".

Para empezar, el presidente del SSC Napoli habló de cuál fue el trofeo más especial: "El ascenso de la Serie B a la Serie A fue un momento inolvidable que te marca, pero ¿sabes qué? Yo, en toda mi vida, he intentado divertir a la gente con el cine y pocos productores han tenido tantos éxitos como yo. Así que cuando veo a los aficionados transmitir por todas partes ese sentimiento de revancha y una satisfacción tan grande... bueno, eso es un disfrute que no te lo da ningún otro título".

El dueño del conjunto partenopeo no pone el ascenso por delante del Scudetto, aclara. Son "emociones distintas. También la fiesta del último Scudetto fue preciosa. Pero quienes gestionan el fútbol a nivel institucional no han entendido aún que están demasiado pegados a su sillón y pensando en cómo ser reelegidos sin tener en cuenta algo importante: no se debe destrozar un juego por jugar demasiado. Es como cuando preparas una cena, te equivocas con el menú y pones demasiadas cosas; corres el riesgo de mandar a casa a la gente con pesadillas. Y ahora aquí las pesadillas son las lesiones, porque se juega demasiado y no se respeta a los jugadores. Habría que cambiar la relación laboral. Los futbolistas deberían ser autónomos para no someterse a un estrés tan vinculante. Ellos ya son auténticas empresas. También hay que regular el poder de los agentes. El fútbol vive gracias a los aficionados y no hay que olvidarlo. En Estados Unidos, la NBA se paró seis meses, mandaron a paseo a todos y volvieron a lo grande. El fútbol inglés, en cambio, no es tan boyante en lo económico como podría parecer, así que algo en nuestro sistema no funciona".

Al número uno del club partenopeo le preguntan si se juega demasiado: "Pero esto ya es un pensamiento manido. Tenemos un sistema medieval, con grandes señores feudales que mandan en el fútbol y creen que pueden ser reelegidos con cosas que dan risa. El problema es que aquí todos quieren sumar, nadie quiere quitar, y entonces nuestros futbolistas, pagados por nosotros, se ceden a las selecciones con una ligereza increíble. Debería ser el club quien decidiera si el jugador puede o no ir con su selección. Da la sensación de que a esos señores de las instituciones no les importa en absoluto la protección del aficionado, para quien el campeonato nacional tiene un valor real y es la panacea de todos los males de la semana. Habría que sentarse y recuperar lo que en su día fijaron Veltroni y Platini. Las nuestras son sociedades de capital que no pueden someterse, como hace diez años, a un sistema de gestión pública. Esto es otra cosa que debemos hacer entender a quien nos gobierna. Hay un problema de base: si vas al mundo de la política, todos son aficionados. Luego, el Gobierno no hace nada para decir: si el fútbol no funciona, encontremos soluciones adecuadas; quizá deroguemos la Ley Melandri, demos libertad absoluta de empresa para poder gestionar el negocio como quiero; no puedes imponerme reglas que me limitan. En cambio, el Gobierno, desde hace 30 años, no hace más que poner trabas para que el fútbol italiano pueda ser fuerte, atractivo y ganador en toda Europa".