Giménez, misión de reivindicarse o adiós: su etapa en el AC Milan puede acabarse ya en enero

Santiago Giménez no quiere forzar la máquina. El delantero centro mexicano, todavía sin estrenarse en la Serie A y en el punto de mira de las críticas tras nueve partidos, sintió un dolor agudizado en el tobillo después de un duro golpe durante el gran duelo a domicilio ante el Atalanta y, por ello, se perderá el partido contra el Parma y también la convocatoria con su selección.

Misión: reivindicarse
El objetivo del Bebote, según apunta el Corriere dello Sport, es ponerse a tono durante el parón de selecciones y volver a estar a disposición de Míster Allegri. También recuperar confianza tras un inicio de curso complicado, con el contador a cero. A Giménez le urge levantarse y romper la sequía porque, sin competiciones europeas y con una competencia feroz, el divorcio con el AC Milan podría llegar ya en enero. Su continuidad como rossonero está en el aire.

Desahogo
Según ha podido saber TMW, Giménez ha tirado del freno de mano de forma voluntaria para someterse a un tratamiento específico que resuelva el problema del tobillo. El parón de selecciones le servirá para ponerse a punto de cara a la reanudación. Baja ante la AS Roma por el contratiempo físico, decidió contar públicamente lo que le ha lastrado en los últimos meses con un post en su perfil de Instagram: "Durante varios meses jugué con un dolor que no me permitió estar al 100%. Intenté seguir para ayudar al equipo, pero la situación empeoró y ahora ha llegado el momento de parar. Es tiempo de recuperarme y volver más fuerte. Dios tiene el control. Gracias por el apoyo, ¡nos vemos pronto!".