El mercado bloqueado, la afición, enero: Lotito, a 360º. "No hemos mentido a nadie"

Claudio Lotito se abre en canal, a 360º, aunque todo conduce siempre al mismo punto: el verano y el mercado bloqueado. Al margen de la cena de Navidad de la SS Lazio, el presidente arranca desde la victoria ante el Parma Calcio para abordar el gran tema del curso laziale: "¿Partido del punto de inflexión? Hacer pronósticos siempre es un error. Este es un equipo que ha recuperado la conciencia de sus medios y la alegría de estar juntos —dijo a TMW y al resto de medios presentes—. Es un grupo unido, de combatientes y no de rezagados, que se compacta ante cualquier adversidad para demostrar su valor. Claro, este año hemos tenido demasiadas adversidades; algunas podían haberse evitado y no por responsabilidad nuestra. Esperamos haber dejado atrás todas estas negatividades y que arranque un nuevo camino para demostrar que este equipo tiene la calidad para competir con todos. Luego, los partidos hay que jugarlos y el club no se sustraerá a ninguna iniciativa funcional y necesaria, no para devaluar el valor de la plantilla actual, sino, en su caso, para integrarla".

Adversidades que, a estas alturas, forman parte del pasado.
"De entrada, aquellas adversidades del mercado de verano, me atrevería a decir, fueron bastante incomprensibles. Teníamos un índice de liquidez, que yo definí como de estupidez: se introdujo cuando el Parma Calcio estaba al borde de la quiebra, con la lógica de preservar la integridad del campeonato, porque hace un monitoreo a corto. Además, era bajo, y se entendía: significaba que debías tener la caja necesaria para terminar la temporada. Luego intentaron incrementarlo con el objetivo de usarlo para las inscripciones, y me parece que ha habido fallos al respecto. Además, choca con el derecho comunitario, dado que no es un índice de solvencia. Es más: hay clubes con el índice de liquidez en regla y situaciones dramáticas desde el punto de vista del endeudamiento".

¿Pero qué pasó?
"Que nuestro director administrativo, al que estimo mucho y he ratificado, porque es una persona íntegra y capaz, imputó a 31 de marzo una serie de costes que podían haberse evitado porque no atañían a la gestión ordinaria, sino a la extraordinaria. Hablo de la academy, del estadio y de otras partidas cargadas a esa fecha. Por 3 millones impactaron. Cuando me trasladaron esta situación, planteé el problema y me dijeron que el índice de liquidez se había abolido el 1 de julio. En ese punto, alguien decidió partir el mercado en dos: el de verano, con una norma ya derogada, y el de invierno, con el nuevo marco de la UEFA, con el que, por cierto, siempre hemos tenido luz verde sin sanciones. Nos sorprendió; nos causaron un perjuicio real porque nos impidieron comprar jugadores. Y si yo no hubiera hecho un mercado potente el año anterior, no habríamos tenido ni equipo. Es más, ni siquiera pudimos vender: teníamos dos en negociación por cifras importantes, con otros dos por sustituir. Y no pudimos hacerlo. Son cosas, que diría alguno, de traca. En ese cuadro, seguimos adelante: nadie ha mentido, nadie ha ocultado la situación. Es más, estábamos convencidos de que, en el peor de los casos, haríamos un mercado a saldo cero. Les hago una reflexión: ese índice sirve para evitar la quiebra de una sociedad. Y la SS Lazio, con todos los respetos para los analistas, no corre ese riesgo. ¿Qué pasó, entonces? Que todo el mundo decía que corríamos peligro de quebrar, generando un daño reputacional. Mi mayor satisfacción es que me llamaron el director del banco y el de la firma de auditoría, riéndose. Habría que haber implantado un índice de solvencia. Creo haber explicado de una vez por todas el asunto: me duele que alguien, de forma interesada, haya usado esta situación negativa para ir contra el club. Me pregunto qué sentido tiene. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio".

Además, las inversiones que ha citado son estructurales.
"La SS Lazio es virtuosa: no tiene deudas, no tiene bonos. Si yo hiciera la academy y pidiera un préstamo, esa deuda no contaría a efectos del índice. ¿Ven lo absurdo? Yo uso caja para ahorrar intereses, movilizo mi propio dinero y no el de otros, mientras hay quien se endeuda por 500-600 millones a un interés usurario del 18% y se inscribe en el campeonato sin ningún problema".

En enero ya no está el índice...
"Las cuentas ya las hemos presentado; ahora no decidimos nosotros, sino la comisión".

¿Por qué nunca hizo una ampliación de capital para desbloquear el mercado?
"Habla de cosas que no son de su competencia... El índice valía 115 millones, el desajuste 3 millones: ¿usted habría puesto 115 millones para fichar en un club que no necesita jugadores? Yo pensaba que el mercado no estaba bloqueado y, de hecho, no debía estarlo. Se aplicó una norma abolida, gestionando el mercado de la temporada de dos maneras distintas. Habrá varios clubes con problemas en enero; veremos qué hace la SS Lazio".

Pero en verano pudieron fichar...
"Los demás clubes tenían un índice de liquidez, que no es de solvencia: puedes tener 700 millones en deudas y estar al borde de la quiebra, pero estar en regla porque cubre a corto. Eso hoy ya no existe".

¿Entonces el problema es federativo?
"Juzgue usted. Con la UEFA nunca hemos tenido problema alguno: háganse una pregunta y dense la respuesta".

¿Y si en enero hicieran falta plusvalías?
"No me pongo la venda antes de la herida. Ustedes van al hospital y se escayolan por miedo a hacerse daño. Yo confío en la gestión y en lo que representa la SS Lazio. Pero busquen un club que tenga unos 300 millones en patrimonio inmobiliario sin contar el estadio. ¿Cómo se puede decir que es una sociedad que está quebrando? La SS Lazio fue el primer club cotizado en Bolsa, el primero en alcanzar un acuerdo con Hacienda, el primero en auditar su marca: todos me lo discutían, y llevamos 21 años generando 15-16 millones de euros de beneficios anuales. La gente debe hablar de lo que sabe; creo conocer algo del asunto, y les digo que todo el sistema es una locura. Quiero ver a algunos clubes: yo no he pedido cambiar los parámetros; muchos sí, porque no encajan en ellos".

¿No cree que haría falta un gesto hacia la afición?
"Si dice que se sienten traicionados, se equivoca. El primero traicionado soy yo: han hecho correr que vendía el club. La SS Lazio no está en venta y, además, no es adquirible; por desgracia, tienen que aguantarme, no hay alternativa. No es que, por presionarme, vayan a cambiar las cosas: ¿el gesto lo tengo que hacer yo? Me han hecho de todo. Y hasta me han fortalecido, porque la gente debe entender que yo soy empresario y vivo también sin la SS Lazio; ellos no: son plumillas, usan a la SS Lazio. Pero ya no se puede usar. Hemos hecho una serie de cosas que ningún club tiene: estoy levantando la academy, el estadio, y me atizan. Si no saben de qué hablan, ¿de qué hablamos? El clima de tensión no lo he creado yo, sino otros. Pregúntenselo a ellos. Porque ese clima, al final, perjudicará a quienes lo promueven".

¿Hay un problema arbitral en Italia?
"No me permito hacer comentarios. Pero quien ve los partidos se da cuenta, y ahí también hay responsabilidad de la afición: cuando está unida, pasan cosas. El perro siempre muerde al más débil: si todos te atacan, otros pueden decir 'total...'. Ayer, en el femenino, pasó lo mismo, pero luego ganamos el partido. Creo que estamos haciendo cosas en el exclusivo interés del club: cuando lo tomé, estaba técnicamente quebrado; había que llevar los libros al juzgado. Me parece que desde entonces hasta hoy, la SS Lazio ha seguido un camino completamente distinto. Probablemente tenemos un tirón internacional, también al otro lado del charco, y mañana lo verán, porque verán a alguien de mi familia tocar la campana del Nasdaq, y será el segundo caso en la historia para un club de fútbol. Yo no puedo librar una batalla contra personas que deliberadamente, de forma interesada y artificiosa, buscan siempre minimizar, crear descrédito y problemas, y azuzar. El equipo está sereno, tranquilo. ¿Les consta que alguien no haya cobrado el salario? Me parece que todos cobran puntuales, pese a estar pagando 30 millones de deudas del pasado. En un año y medio ya no estarán y tendré 30 millones más de caja".