Bolonia, la gestión milimétrica de Lucumí: Italiano se adelanta pensando en la Juventus
La victoria por 1-2 en el campo del Celta de Vigo acercó al Bolonia a la clasificación para los playoffs de la Europa League, pero, sobre todo, puso de relieve un rasgo cada vez más evidente del técnico del Bolonia: Vincenzo Italiano (72 onces distintos hasta la fecha) planifica cada decisión con un cuidado casi obsesivo. Y la gestión de Jhon Lucumà en las dos últimas semanas es la prueba más clara.
En Vigo, en un duelo europeo con mucho en juego, el técnico no le concedió ni un minuto al colombiano, prefiriendo alinear a Lykogiannis como central junto a Heggem. Una decisión que podÃa sorprender, porque el miércoles, en el último entrenamiento, Lucumà habÃa corrido y dejado señales positivas. Pero Italiano ya lo tenÃa decidido: cero riesgos innecesarios. Con la Juventus a la vuelta de la esquina, tocaba máxima prudencia.
Una decisión que viene de lejos. Tras el partido de Copa de Italia ganado ante el Parma, Italiano lo dijo sin rodeos: "Forzamos a Lucumà pese a un problema en el tendón. Espero tenerlo en Roma". Ese mensaje —en apariencia una simple constatación— se convirtió en una señal de alarma. Porque en Roma, contra la Lazio, Lucumà no pisó el césped, obligando a Italiano a recurrir primero a Casale, que luego se lesionó, y posteriormente a De Silvestri.
De ahà que la suplencia total en Vigo no fuera casualidad, sino un riesgo calculado: Italiano eligió la protección como única vÃa posible. Más aún a la luz de las ausencias de Vitik y del propio Casale, que han dejado las rotaciones defensivas en el mÃnimo.
Ahora todo, inevitablemente, gira en torno a LucumÃ. SerÃa impensable otra ausencia también ante la Juventus, especialmente después de verlo en el último entrenamiento antes del viaje a España. Pero cualquier decisión llegará a última hora: el estado del tendón del 26 del Bolonia sigue siendo la variable decisiva.
Si el colombiano no llega a tiempo, Italiano se verÃa obligado a una solución de emergencia: De Silvestri de central en pareja con Heggem. Una opción posible, pero ni mucho menos ideal para uno de los partidos más esperados del año en la ciudad.
El plan, eso sÃ, está claro: preservar hoy para tener mañana. Y por eso el hecho de no utilizarlo en la Europa League se convierte en la pista más fiel de la estrategia de Italiano. Una gestión que apunta a devolver al Bolonia a su lÃder defensivo en una noche que vale mucho más que tres puntos.