Pavard y Balerdi, fuera del once inicial; De Zerbi explica: "Quería defender con cuatro y construir con tres"
La sorpresa saltó ya en el anuncio de las alineaciones: para la visita a Bélgica, el Olympique de Marsella optó por prescindir de varias piezas clave en la zaga. Una decisión que dio que hablar, sobre todo por la importancia del duelo ante el Union Saint-Gilloise, clave en la pelea por los play-off de la Champions League y que los franceses acabaron ganando 3-2.
Al final del partido, Roberto De Zerbi aclaró sus decisiones, explicando que había priorizado un plan táctico específico para controlar mejor la salida de balón y la amplitud del rival, aunque ello supusiera dejar en el banquillo a titulares asentados: "Pavard está jugando muchísimo y, a mi juicio, necesitaba un respiro. Lo de Balerdi al banquillo fue una decisión técnica: quería defender con cuatro, con Weah, Murillo, Aguerd y Emerson, pero construir con tres, con un solo central puro y dos futbolistas con capacidad para conducir y proyectarse por fuera", explicó el técnico.
De Zerbi también volvió sobre el cambio de Weah, sustituido poco después del descanso: "Lo quité con pena, porque estaba amonestado y temía que viera la segunda amarilla. No quería correr riesgos". Una decisión, por tanto, más ligada a la gestión de esfuerzos y a la estructura táctica que a castigos o cambios de jerarquía. En un partido frenético y de riesgo hasta el final, los movimientos del entrenador italiano terminaron siendo determinantes para volver de Bruselas con tres puntos de oro.