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Moyes también justifica a Gueye: "Me gusta que los jugadores se encaren si alguien se equivoca"

de Michele Pavese

Una noche que quedará para la historia de la Premier League. El Everton asaltó Old Trafford con un 1-0, jugando casi todo el partido con diez por la expulsión de Idrissa Gueye, que soltó una bofetada a su compañero Michael Keane.

El gesto dejó a todos boquiabiertos. El internacional senegalés, fuera de sí tras ver la roja, fue incluso instado por sus compañeros Jordan Pickford e Iliman Ndiaye a abandonar el césped y dejó a los suyos con diez durante 80 minutos. Aun así, el Everton encontró el gol decisivo en el 29' por medio de Kiernan Dewsbury-Hall y se llevó un triunfo de enorme valor. Al final, el propio Dewsbury-Hall restó importancia a lo sucedido: "Fue un momento de locura, evitable. Idrissa nos pidió perdón, dijo lo que tenía que decir y ya está. Toca seguir. Nuestra reacción fue increíble, de muchísimo nivel. Este episodio nos ha hecho crecer".

Aún más llamativa fue la postura del entrenador David Moyes: "La expulsión fue dura, pero según el reglamento, si le sueltas una bofetada a un compañero te puedes buscar problemas. Dicho esto, me gusta que mis jugadores se encaren entre ellos cuando alguien se equivoca. La dureza sirve para sacar resultados". Moyes añadió: "Estoy decepcionado por la expulsión, pero todos, como futbolistas, nos hemos enfadado con los compañeros. Gueye pidió perdón, agradeció a los compañeros y al equipo por la victoria". Este triunfo permite al Everton igualar al Manchester United en la clasificación con 18 puntos.


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